carta a tailandia

aunque te viví poco, fuiste importante. muy. fuiste casa, después de 2 días de viaje. fuiste lugar seguro, dónde descansar, donde bajar la guardia, donde bañarme, donde volver a sentirme yo. fuiste también el recordatorio de que mañana es nunca, que si quiero algo, lo tengo que hacer hoy. que me toca levantarme, ir, buscar. que si quiero algo, me toca ir por ello. 

fuiste el primer lugar en el que he estado sola, realmente sola, en mucho tiempo. donde pude tomar decisiones solo pensando en lo que yo quiero. solo basándome en mi sentir y mi intuición. no le tenía que responder a nadie. fue un cambio de paso divertido. importante. rico. liberador. y claro, fuiste el primer lugar en el que me perdí, hace mucho tiempo no me perdía. no así, no tanto. fuiste también el lugar que confió en mí. que no tenía cómo pagar y la mesera me dijo, tranqui, ve, saca la plata, no hay lío, acá te espero. sin dudar que iba a volver y aunque me demoré un poco, no hizo cara de sorpresa al verme otra vez.

gracias por recibirme con brazos abiertos, por dejarme sentir abrazada, aceptada, confiada. gracias por la confianza. era un sentimiento que no sabía cuánto necesitaba, hasta que lo tuve. gracias por ser el lugar que me dejó irme. que no me puso problema. gracias por eso. por ser el primero de mi viaje. el primero de la colección de este año. gracias por dejarme habitar tu cultura como si fuera mía. no sé si estuve más de 12 horas parada en tu piso, pero fueron muy importantes, las llevo en mi corazón.

febrero 26, 2025

mar: kenya- sudáfrica

9:54 am